domingo, 29 de marzo de 2015

Pensamientos dispersos que cuelgan sucesivamente de un hilo con un gancho de ropa

Los ojos jóvenes nos llevan a esa era de inocencia. Que gracia me da ver tus fotos, tu sonrisa que se me hace tan lejana. Que se yo. Somos tan diferentes que acabamos de contradecir el axioma de Euclides. Las paralelas se tocaron alguna vez. Hoy no te importo, hoy no me importas. Mañana, que se yo. Hoy no compartimos el mismo código, no nos desciframos de la misma manera. Nos necesitamos como fuerzas opuestas, que choque explosivo nos espera mañana. No se escribir en verso, prefiero la prosa. Que se yo. Los juegos lógicos ya me cansaron, no sé deducir de premisas a conclusiones. Me llaman dislexica porque no voy a tu ritmo. Confundo el atrás con el adelante, adelante y se fue atrás. El tiempo que nos pasó es tan irracional que ahora es más otra dimensión que un buen recuerdo.

sábado, 28 de marzo de 2015

¿Qué sucede con la moral en un mundo que defiende fervientemente la propiedad privada y se maneja en un mundo virtual de transparencia?

Las redes sociales y el mundo virtual nos incitan día a día a compartir cada momento, motivan nuestra curiosidad por la información del otro. Sin embargo, nos cuesta llenar formularios médicos en los momentos en que realizan preguntas que avanzan sobre la línea que llamamos 'íntimo'.

¿Qué sucede con la intimidad en la segunda década del siglo XXI? Tal vez aún no estamos preparados para compartir toda nuestra información. Sin embargo, la presión social nos exige con el paso de tiempo compartir y completar aquellos formularios de información. Por un lado, nos agrada saber del otro, lo utilizamos de parámetro para nuestras propias opiniones. La comunicación nos da cierto parámetro moral. Y a pesar de esto sabemos que no podemos controlar la cantidad de información que fluctúa y puede ser utilizada en nuestra contra. Cuanto más atados a los dispositivos, nuestro yo deja de ser cada segundo menos privado. Hasta tal punto Internet avanza de una manera tan eficaz y veloz que las leyes que regulan la privacidad no han podido frenarla.

¿Qué hubiese sucedido si Mr Hyde hubiese tenido facebook? Nuestro lado monstruoso sale a plena luz del día. La privacidad quedará relegada solo a la realidad, pero cada día nos hacemos más virtuales. El dinero es virtual, el amor es virtual. Y se ríen de quienes desconfían en la metafísica.

Es clara la aporía entre el mundo formado por Internet, el cual agota su necesidad hambrienta de nuestra información y donde su supuesto principal es 'compartir'; versus el mundo 'real' donde nos cuesta decir en voz alta nuestro nombre. Y entre dos mundos sólo se puede desatar una guerra.

lunes, 16 de marzo de 2015

Una mujer muere hoy. Violación, trata y prostitución. La mujer, 'cosificada', comparable a una lámpara. 

Un hombre muere hoy. 

¿Y qué sucede con aquellas mujeres que sólo lo usan como medio para fin? ¿Qué sucede con la mujer del multimillonario, con la amante del senador del partido opositor, con la estudiante desaprobada?

El hombre es cosificado, la mujer es cosificada. 

Uno a uno en la cadena marchamos, reclamamos la justicia injusta. 

Por quién voy a alzar mi mano, si al final del día, estoy cansada de estudiar y trabajar. Entreteneme, no me hagas pensar. 

Y ahora, hay que votar. 

martes, 3 de marzo de 2015

Tu ojo biónico no puede ver,
todo aquello que puede pasar.
Es imposible que calcules cada molécula,
que cruza en el pasillo de piel.

Conté el tiempo de tu silencio,
como cuento los segundos que
faltan para que empiece a cantar.

Conté el tiempo de tu silencio,
con mi método espacial.

Tu pesa de cristal no puede contar,
todo aquello que tengo para dar.
Dale, abrazame una vez.

Soy la causa primordial
de esta adicción.
Soy la causa final,
del efecto  sin químicos.